CAFEÍNA

¿Qué es la cafeína?
La cafeína es un alcaloide de la familia metilxantina que en estado puro es un polvo blanco muy amargo, actúa como estimulante del sistema nervioso central, el corazón y la respiración.

¿Dónde la encontramos?
La cafeína fue descubierta en 1819 por Ruger en los granos de café. Se halla en las hojas, semillas o frutos de más de 60 plantas, entre las más conocidas tenemos a las nueces de cola (guaraná), los granos de café y de cocoa, la yerba mate y las hojas de té. Con la cafeína se elaboran las bebidas cola, café, té y chocolates donde es utilizada como saborizante.

¿Por qué tantas personas recurren a ella?
Esta droga tiene un gran poder de estimulación, disminuye el cansancio y la fatiga, ayuda a la memoria facilitando la asociación de ideas y mejorando la percepción sensorial. En su justa medida la cafeína es muy beneficiosa ya que mejora el rendimiento laboral, incrementa la atención y facilita el proceso bioquímico que se desarrolla durante la formación de la memoria en el cerebro.

¿Cómo actúa en nuestro organismo?
Desde el momento que ingerimos el alimento que contiene cafeína esta es rápidamente "absorvida" con el azúcar que siempre suele acompañarla y podemos sentir sus máximos efectos en tan sólo 20 o 30 minutos después.
La acción estimulante de la cefeína en el sistema nevioso central se debe a su capacidad para aumentar los niveles extracelulares de noradrenalina y dopamina en la corteza prefrontal del cerebro (concentración), y su capacidad para bloquear los neurorreceptores del cerebro a la adenosina inhibiendo sus efectos sedantes (estimulación).

¿Cuál es el peligro de consumir cafeína?
Sus principales efectos peligrosos son el aumento de la presión arterial, promueve la formación de orina e incrementa la actividad cardiopulmonar. A dosis altas produce excesiva excitación (más de cinco tazas de café, tres prociones de bebidas cola y una de chocolate en el día), ansiedad e insomnio, temblor, hiperestesia (aumento exagerado de la sensibilidad) e hiporreflexia (disminución de los reflejos). Estimula la secreción de ácido gástrico, lo que origina con frecuencia intolerancia gástrica. No se recomienda el uso de bebidas con cafeína junto con medicamentos ulcerógenos, como las aspirinas.
El consumo en grandes cantidades puede provocar una intoxicación, sus síntomas son: insomnio, nerviosismo, excitación, cara rojiza, aumento de la diuresis y problemas gastrointestinales. Más allá de un gramo al día puede producir contracciones musculares involuntarias, desvaríos, arritmia cardiaca y agitaciones psicomotrices.

Efectos a largo plazo:
Como en el resto de las drogas su consumo puede dar lugar a la aparición de dependencia que tiene los siguientes síntomas: dolor de cabeza, irritabilidad y somnolencia patológica.


*** Una forma de dejar la cefeína sin que se provoquen trastornos por la suspensión repentina del consumo de esta es dirminuyendo progresivamente su consum a lo largo de varios días***